Cuando se quiere comenzar un negocio de productos o servicios, una preocupación fundamental está referida a cuánto van a costar los mismos y cuánto se debe cobrar por ellos.
Recuerde que sea que brinde un servicio o venda un producto tangible, todo conlleva un trabajo.
Entonces, primero debe calcular el costo de producir el producto o elaborar el servicio y luego, a cuanto lo ofrecería.
¿Como determinar el costo de mi producto o servicio?
¿Cuánto debo cobrar por mi servicio?
Cuando hablamos de servicios, recuerde que va a depender de lo que usted ofrezca, en base a su conocimiento y experiencia.
No es lo mismo un servicio técnico que una asesoría profesional. Por ejemplo, un maestro de obra podría cobrar por la construcción de una casa un precio muy alto por todo lo que conlleva el trabajo físico, operarios, etc y un abogado cobrar exactamente lo mismo por asesorar a una empresa en determinado tema.
En este caso, la diferencia radica en "qué se está ofreciendo", ¿quién lo está ofreciendo? y ¿quién lo está necesitando?.
Sea cual sea su rubro de servicios de su negocios, acostúmbrese a tener tarifas determinadas dependiendo del servicio que va a brindar. Siempre tenga un margen para negociar los precios con sus clientes potenciales.
Muchas veces se pierden negocios porque no hay capacidad de negociar. Tome en cuenta, también, todo el tiempo que llevará cumplir con el trabajo, el grado de dificultad, si necesitará contratar apoyo, etc
Todo esto debe ser plasmado en un presupuesto o "proforma" que le entregará al cliente potencial, esperando que se concrete el negocio.
¿Cuánto debo cobrar por mi producto?
Es imposible que una empresa haga un producto determinado y luego obtenga “0” de ganancia.
Por ejemplo, supongamos que su negocio sea del rubro de gastronomía, deberá calcular todos los costos que cuestan producir cada platillo y el precio de venta que tendrá al público.
En este caso tendrá que valorar tanto el costo de todos aquellos insumos para preparar un plato de comida (supongamos que sea una porción de pollo con papas a 15$) y cuántos es capaz de vender por día.
A ese precio tiene que aumentarle un porcentaje que será la “ganancia”. Entonces debe primero valorar el costo que lleva preparar los platos, cuántos se hacen al día, cuántos clientes llegan y una vez que se tiene el monto total, sumar el total.
Es recomendable que, al inicio de su negocio, mantenga precios que sean competitivos frente a otros. Esto es a fin de atraer a tantas personas como sea posible, para obtener algunos ingresos.
Si ofrece un buen producto, es posible que la publicidad de boca a boca le ayudará y la idea es que después de unos meses va a estar en una mejor posición para aumentar los costos de los mismos.
También es importante darse cuenta de que va a cometer errores en el camino. Cuando esto suceda necesita pensar en positivo y no dejarse vencer. Es una experiencia que le permite aprender.
Siempre tenga fe en sí mismo. A veces cualquier negocio pasará por un período difícil, es cuando se tiene que ser fuerte. Cuanto más esfuerzo se hace, más recompensas se consigue.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario